Ahora que llegue a casa, fue sorprendente que en un lugar donde venden licor, está a todo volumen la canción que me dedicaste “En tus Pupilas” fue increíble escucharla! Siempre será nuestra canción, es muy linda y representa lo que llegamos a vivir en nuestro primer mes, el mejor mes de una relación que pude tener hasta el momento de mi vida. Es muy semejante a lo que vivimos, letra por letra, además en el primer mes, fue un arrullo para poder dormirme. Siempre es lamentable producirte lágrimas, me duele en el alma hacerlo. Sé que esta etapa de tu vida es muy dura y que desearías no estar. Me apena mucho y pues no puedo sentir lo que sientes pero trato, pero lo he hecho mal, porque te hago llorar.
Decidí contarte lo que ocurrió la semana pasada. Pensé, siempre, que la sinceridad es mejor. Perdóname por la “infidelidad” (fue un beso con alguien por quien sentía muchos sentimientos, fue mi impulso). Pero con lo que me contó Andrea… hasta pensé y descanse un poco, me dije bueno, también lo hizo. Pero escucharte en la tarde diciéndome que te había servido mucho poder alejarte de mí, para poder independizarte, en algún sentido poco entendible me agrado, ya que así, al separarnos no sufriríamos. El segundo y tercer mes, ha sido un asco… conocernos? Imposible, ni nosotros no nos conocemos a nosotros mismos. Pienso en que si lloras, tu mamá se sentirá mal, porque te hago sufrir, Martín* tendrá razón, de hecho él tiene razón, una persona como yo no conviene… destinado a estar solo, no puede lograr una adecuada conexión.
La situación emocional por la que pasas es dura, y de verdad quisiera estar a tu lado, como un amigo para darte fuerzas y ayudarte a distraerte de la vida normal, a la que yo desde que tengo memoria me escape, porque en verdad no me interesa mucho vivir viendo tanta cosa mala, tanta muerte, robo y corrupción.
Algo en lo que no estoy de acuerdo, es que dijiste que no he tenido buenos detalles contigo. Me indigno mucho, porque yo no tenía una relación desde hace muchos años y mi adolescencia la pase leyendo, estudiando y jugando “Edad de los Imperios”… y sabes que lo escribí en mi blog, en el blog donde te vuelvo a remitir para que leas los detalles que tuve contigo. Cada día pensaba en cómo actuar, recuerdas? En qué hacer, que inventarme, donde llevarte, para que no te aburrieras. Me dio tristeza saber, que mis invitaciones y mis ideas, fueron menospreciadas porque un amiga durmiera en mi hombro, la peinara y le cantara!... Yo te peinaba cada vez que te miraba a la cara! Lo hice, pero estabas muy enfocada en mis ojos como para sentir mis dedos sobre tu cabello, también te cante… lo hice varias veces! Recuerda que cuando estaba muy ronco, te cante en la carrera octava, en el parque Bolívar e incluso en el bus cuando volviamos a casa: “en tus pupilas” o cuando poníamos canciones en el IPod. Que más detalle que llevar la fecha de los días que llevamos juntos, lo que hicimos, recordar esto. Puedes imaginar quien recuerda esto? Sabes cuantos hombres le dan importancia a las fechas?? No creo. Recuerdas el intento de Picnic, recuerdas que te di un libro que no terminas de leer, mientras yo he leído 3 en ese mismo tiempo, recuerdas los dulces que te di, recuerdas cuando compre vodka y no bebiste tu botella, pero con Alejandra* si compraste una, ahh?? , Recuerdas cuando fui a visitarte a tu trabajo… me pediste que no fuera más, porque no podías atenderme bien! Lo recuerdas???. No te digo esto de maldad, te lo digo para que reflexiones y me digas si es que no he sido detallista, porque si eso no lo es, entonces no sé qué es serlo… y pues en el futuro espero aprender para una próxima relación. Ya se te olvido las cartas que te escribí, se te olvido lo que te decía mientras dormías, se te olvido que pasé derecho mientras dormías y te vi dormir la primera vez que te quedaste en casa. Afortunadamente a mí no se me olvida, ni se me olvidara… son mis experiencias! Y una de las mejores fue besarte en las escaleras eléctricas! Pero ya se te olvido… y es normal y no debo juzgarte por eso. Creo que para que no te hagas daño debes seguir creyendo que nunca tuve detalles contigo, que fui frió como quieren creer las personas… “la eterna soledad del joven Villa*”.
Me queda por decirte, que es grato compartir contigo todo eso… recuerda bien… fuiste mi primera vez en casi todo, y de todo corazón deseo decir que eres mi primera vez ABSOLUTAMENTE en todo y olvidarme de los episodios pasados en los que experimente. Y esto que vivimos no fue un experimento.
No quiero jugar al malo o bueno, pero pues mi mente me dice que soy el malo, y así lo piensas también. Me falto mucho por compartir contigo, invitarte a mi casa como lo desee, invitarte al quirófano, ir a piscinas, volver al picnic, compartir tu y yo, como habíamos quedado, después de que rompiéramos con la mitad de la ciudad (La ciudad, tu y yo).
En un principio me dijiste que no querías rollos, tal vez debió ser así, no me atrevo a pronunciarme sobre eso, creo que sería muy doloroso de mi parte; además sé que me dijiste que no deseabas ser mi amiga. Yo desearía que siguiéramos como amigos, que nos viéramos de vez en cuando, que fueras a mí casa o yo ir a la tuya, que me llamaras para preguntarme por mis estudios, por mi alimentación, por mi sueño, por mi estado de ánimo, o que intentaras esperarme en el terminal (ese detalle ha sido el más lindo, nunca nadie ha hecho esto por mí; no llegaste a tiempo, pero tuviste la intención). Extrañare las llamas y tu sonora voz diciendo: HOLA AMOR!!! Es muy lindo detalle, te lo agradezco. No tengo nada más que recriminarte, de hecho no es para que tomes esta nota como acusación, sabes que te quiero mucho, y te querré mucho. Eres y serás muy importante para mí.
Solo te pido, que si deseas recordarme, recuérdame como en el primer mes, que temblaba al verte, me agitaba, no sabía qué hacer, me daba miedo hablarte, y por lo más importante de mí, mi semblante de felicidad… mi sonrisa, mi mascara contra la realidad.
Te quiero mucho, puedo llamarte amiga? Si no es así, no te sientas mal… sabré entenderlo, tendré la suficiente sensatez para asimilarlo, hacer mi duelo. Y por último quiero decirte dos frases. La primera, que nunca te gusto, pero que para mí ha marcado mi vida, porque me ayudo a alejarme de Melissa*: “Si amas a alguien, sabrás cuando dejarla libre”. Y la segunda, que espero que se me aplique a mi recuerdo: “Espero ser un peatón que camine por tu mente y que no me atropelle tu olvido”.
Te deseo muchos éxitos el próximo semestre y espero que llegue alguien a tu vida que sepa apreciar lo valioso que eres. Sabes ya me puedes agregar a la lista de fracasos amorosos! Da algo de risa, no? Deseo con mi alma, que todo se solucione en tu familia, a tu linda mamá, en verdad es muy linda y es muy cariñosa… y gracias nuevamente por el mango, delicioso. Disfruta de lo que viene en el futuro y sabes que rezaré por ti, por tu familia y por tu papá, que raramente no puedo sacar de mi cabeza, hace parte de mi memoria adquirida al subir al 5 piso.
Adiós.
Y termino todo... se fue al mundo de las ideas con Platón. Un gran recuerdo que me quedara, no negare que extrañare su sonrisa, sus detalles, sus frases, y que me quito la soledad de mi cuerpo.
Eternamente agradecido.
Haré una nota mental: No entregarme tanto!
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